“La
excelencia moral es resultado del hábito. Nos volvemos justos realizando actos
de justicia, templados, realizando actos de templanza, valientes, realizando
actos de valentía. Adquirir desde jóvenes tales o cuales hábitos no tiene poca
importancia: tiene una importancia absoluta”.
-Aristóteles
“Nada
hay más fuerte que el hábito”. –Ovidio
“Si
tenéis el hábito de tomar las cosas con alegría, rara vez os encontraréis en
circunstancias difíciles”. –Robert Baden-Powell
“La
vida no es más que el tejido de los hábitos”. -Henry F. Amiel
“Quien
no se resuelve a cultivar el hábito de pensar, se pierde el mayor placer de la
vida”. – Thomas Alva Edison
Construyendo hábitos de excelencia
Una de mis grandes pasiones es
entender el comportamiento humano y aprender de las personas que son altamente
exitosas en lo que hacen, cómo lo hacen y porqué hacen lo que hacen.
En libro “Los 7 hábitos de la gente altamente efectiva” de Stephen R.
Covey, comprendí por primera vez lo que es un hábito y de qué manera mí vida es
influenciada por los hábitos mentales que he desarrollado a lo largo de mi
existencia.
Se explica de la siguiente
forma:
Un hábito es la
intercalación de tres diferentes componentes: el conocimiento (qué y porqué), las habilidades (cómo) y el deseo
(querer). Desde mi punto de vista, un hábito se desarrolla a nivel
subconsciente debido a que en nuestro cerebro o mente se lleva a cabo un tipo
de programación para realizar ciertas cosas de cierta manera y repetidamente. Este
tipo de programación se vuelve algo sumamente fácil de hacer y es la manera más
sencilla de describir un hábito.
Es interesante notar que son
nuestros hábitos los que gobiernan nuestra vida, por ejemplo, hay veces en que
deseamos hacer algo diferente como hacer ejercicio todos los días. Hacemos
nuestra parte los primeros días, pero después de una o dos semanas regresamos a
la anterior rutina.
Es también algo muy normal
que cuando comienza un año nuevo, muchas personas se ponen la meta de que en
ese próximo año van a mejorar su condición física, pero mientras avanzan los
días y meses se dan cuenta de que no pueden salir de sus antiguos hábitos
alimenticios y por ende, no logran sus objetivos.
Con los hábitos de
excelencia pasa lo mismo. Es a veces muy difícil dejar las rutinas mentales que
hemos desarrollado a lo largo de muchos años y tal vez décadas. Es por eso que
quizás no sea muy posible desarrollar hábitos nuevos de la noche a la mañana.
Los grandes corporaciones
mediáticas (cadenas televisivas) son poderosas creadoras de hábitos en la gente
y es sumamente lamentable que estos hábitos no sirven muchas veces para
desarrollar nuestro máximo potencial. Hace más o menos un año yo veía y leía
mucho las noticias, sin embargo, no me daba cuenta de que gran parte de las
noticias me producían miedo, desesperación, inseguridad e incertidumbre, lo
cual afectaba mi perspectiva de la vida. Pensaba y hablaba mucho de la política
e instituciones gubernamentales. Tiempo después me di cuenta de que esto me
afectaba mucho pues yo deseaba ser entusiasta y optimista pero mis hábitos
mentales me tenían atado a todo tipo de sentimientos negativos. Fue así como
tomé la decisión de leer libros que me inspiraran y motivaran a buscar hábitos
excelentes. De esta manera, el tiempo que invertía en ver televisión se fue
haciendo cada vez más pequeño hasta que no es uno de mis hábitos hoy en día.
Tal y como lo mencioné en
una de las frases de arriba, la vida no es más que el tejido de los
hábitos que poseemos. Muchas veces estos
tejidos se hacen demasiado fuertes como para romperlos pero sí es posible
deshacerte de las rutinas que destruyen y deterioran tu verdadero potencial.
En este apartado te escribo
3 habilidades o hábitos que puedes desarrollar desde este preciso momento, los
cuales a su vez destruyen otros hábitos que no te dejan progresar y lograr tus
metas más preciadas.
PRIMERAMENTE te hago la
invitación general a que despiertes tu entusiasmo por hacer las cosas pequeñas
de la vida. Así de simple. Algunos sabios han llegado a la conclusión de que
son las “cosas pequeñas y sencillas” las que logran nuestros mayores triunfos
en nuestra vida. Es por eso que te exhorto que busques que cosas puedes hacer
desde donde te encuentras que no haces muy a menudo como por ejemplo:
-
Leer un libro
interesante
-
Aprender más acerca
de una habilidad que te gustaría desarrollar
-
Escribir tus metas en
papel y tenerlas a la vista
-
Escribir una carta o
email a un amigo o pariente que no viva cerca de ti.
-
Visitar a algún
conocido
-
Caminar o hacer
ejercicio
-
Alimentarte un poco
más saludable
Estas y muchas cosas no tienen por qué quitarte mucho tiempo de tu
día pero créeme que te sacan de la rutina y forman hábitos excelentes.
En SEGUNDO, te recomiendo
mucho el que lleves una agenda. Planea tu día o te aseguro que las
circunstancias o situaciones te van a planear a ti a su modo. Tú debes
construir tu destino no tu destino a ti. Al igual que una casa, existen planos
que fundamentan la construcción pero de ninguna manera dejaría que alguien construyera
la casa de mis sueños sin poder ver primero los planos del proyecto.
Planear es lo que diferencia
a los que logran grandes cosas y a los que piensan que no tienen suerte en la
vida. Es por eso que te invito a que planees. Si ya lo haces, de maravilla y
compartirás conmigo el conocimiento de que planear te lleva más lejos que
simplemente salir a la intemperie y buscar sobrevivir.
TERCERO. Una de las más
altas recomendaciones que yo mismo he recibido y que he empezado a llevar es un
registro o diario de los acontecimientos que pasan en mi vida. Quizás a veces
suele parecer algo superficial o tonto, pero a largo plazo, es una de los más
valiosos tesoros para uno propio y para los demás. Existe gran sabiduría cuando
desconfiamos de nuestra propia sabiduría y buscamos registrar las frases,
pensamientos y acciones realizadas que más adelante podemos utilizar para
mejorar en cualquier sentido o hábito.
Somos lo que hacemos
repetidamente, así que hagamos aquello que nos brindará mayores satisfacciones
el día de mañana. Deseo de todo corazón que esta información te ayude a mejorar
tus actuales hábitos y que igualmente progresemos hacia nuestro gran potencial
que poseemos.
Hasta pronto,
Manuel de la Cruz Escalante