Casi cada día me encuentro buscando herramientas para
mejorar mi aprendizaje y la mayoría de las veces me encuentro con estupendo
material de distintos autores. Uno de los que recientemente comencé a estudiar
es Jim Rohn.
Ha sido para mí un gran tesoro encontrar el material de
este autor hoy en día. Sus palabras, frases y enseñanzas son un mundo fácil de
entender y aplicar para el beneficio común.
En este apartado me gustaría hablarte de un nuevo modo de
vida o filosofía (como lo llama Rohn), sobre cómo podemos aprovechar nuestros
recursos y oportunidades para crecer al máximo y llegar a donde queremos estar.
En sus charlas, seminarios y conferencias, Jim hablaba
acerca del viento. Del viento económico, del viento político, del viento
familiar, del viento espiritual y de cómo este viento nos afecta a todos por
igual.
Rohn explica algo sumamente interesante y lo expresa con
sencillez esclarecedora: "No podemos cambiar el rumbo del viento, pero si
podemos ajustar nuestras velas"
Todos estamos expuestos al viento de la vida
No hay oportunidades perdidas. Siempre alguien más
preparado las aprovecha. La clave del viento es usarlo a nuestro favor para ir
este nos promueva y nos lleve a donde deseemos estar.
Significa que debes y debo generar un estilo de vida o
filosofía que me genere abundancia y crecimiento. Este paradigma p programación
mental basada en principios correctos funcionan como velas bien ordenadas cuya
calidad nos permite avanzar a nuestro favor con suma facilidad, tal como un
barco velero es empujado por el viento.
La única diferencia entre quien triunfa y quien tan sólo
intenta se encuentra en las velas mentales. Esos programas interiores que
llevan a los diferentes resultados manifestantes del buen o mal condicionamiento
mental.
Hay una serie de estrategias que nos ayudarán a ajustar
nuestras velas y así aprovechar el viento. Tal vez no sea el mejor viento, pero
seguro nos llevará más lejos si estamos preparados.
Primeramente, Jim Rohn nos aconseja que debemos trabajar
más en nosotros mismos de lo que hacemos en cualquier otro tipo de trabajo.
Nuestro mayor activo es nuestra mente y la mayor inversión está en proveer todo
tipo de aprendizaje eficaz a esta herramienta. Cuando trabajamos en nuestras
habilidades con ímpetu, nuevas puertas se abrirán, porque nos volvemos más
valiosos en cuanto al viento de la economía.
Es muy importante llevar metas y registro de nuestros
logros ya que todo esto nos proporciona un aprendizaje y una mejora continua.
Es de gran valor mirar atrás en nuestra vida y poder visualizar nuestros
éxitos. Esto forma parte de una disciplina que a largo plazo brindará uno de
los mayores gozos de nuestra vida.
Así que planea. Yo he decidido planear para 5 años y he
tenido que establecer pequeñas metas para poder ver mis sueños volverse
realidad en el tiempo precisado. Sé que si ajusto mis velas mentales y las
programo hacia el éxito lograré todo cuanto me proponga.
El proceso de ajustar tus velas ha comenzado hoy mismo.
No te quejes del viento, antes bien, aprovéchalo.
Cada adversidad puede utilizarse para mejorar.
"No pidas por menos problemas. Pide más
sabiduría"
"Pide por más habilidades" porque las
habilidades te brindarán las soluciones y te encontrarás un paso más adelante
en la cadena de la experiencia.
"Se parte de la solución, no parte del
problema"
Hasta Pronto,
Manuel de la Cruz Escalante
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